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Por muchos años me sentí frustrada porque sabía que había una forma de vivir y de trabajar bajo un paradigma centrado en la persona, hasta lo había llegado a experimentar, pero a pesar de muchos esfuerzos no lograba conectar al cien esta realidad en mi trabajo. Comencé a cuestionarme mucho, ¿para quién y para qué estoy trabajando?, ¿cuál es el impacto de lo que estoy haciendo diario e invirtiendo la mayor parte de mi tiempo?
Soy comunicóloga y siempre en el trabajo me pedían ayuda diciéndome, "cómo mejoramos la comunicación, es pésima y no nos llevamos bien; ayúdame a entender por qué estoy teniendo problemas con los clientes, con mi equipo, no sé por qué ya no quieren trabajar en la empresa".
Estas dos situaciones me empezaron a generar estrés, mucho, tenía que encontrar una solución. Para dejar de sentirme así conmigo misma y poder ayudar a otros, comencé a involucrarme y a estudiar más sobre cómo actuar bajo este paradigma en mi vida diaria y laboral.
En el camino, encontré personas que han dedicado su vida a estudiar y a poner en práctica cómo vivir la fraternidad y la reciprocidad en la economía, la política, la comunicación, etc. Conocí empresarios que llevan más de 20 años siendo exitosos, productivos, sustentables, innovadores y al mismo tiempo contribuyen de forma positiva y congruente a la sociedad y a todos sus colaboradores, tienen como su centro el Amor. (Impresionante, emocionante.)
Me di cuenta de que lo que anhelaba es posible y no era la única que lo buscaba, colaboradores, emprendedores, empresarios, freelancers y muchos más, estábamos dispuestos a encontrar la forma de lograrlo.
Por ello decidí emprender y co-fundar HUMA, para poder compartir con más personas y organizaciones todo esto que sigo descubriendo, para ayudar a solucionar problemas que nos estresan, preocupan y dañan interior y socialmente; de poder construir juntos un camino que lleve a las organizaciones a cumplir con su propósito en congruencia con sus valores, su gente, con el medio ambiente; de crear entre todos ese mundo que queremos y que podemos hacer realidad YA, lleno de sueños cumplidos, personas felices, amor, paz y unidad...y sí, desde las organizaciones.
- Karla Prieto Chávez
Creo en el enorme potencial que tienen las organizaciones para generar riqueza en el sentido amplio de bienestar (wealth) para todos, en donde se crea valor económico y valor social desde la libertad, la equidad y la reciprocidad. Creo en el valor fundamental de reconocer a la persona, lo que hace, su esfuerzo, su contribución y los retos que enfrenta para tratar de entenderla desde su complejidad y profundidad para así favorecer la confianza y la cooperación.
Un tema que me ha movido durante toda mi vida es el poder comprender las causas que generan las grandes diferencias entre pobreza y riqueza, y una pista para esta búsqueda vino de la frase del economista Kenneth Arrow: “Podría afirmarse con gran verosimilitud que gran parte del subdesarrollo del mundo se explica por una falta de confianza recíproca”. Cuando logramos tener una mirada atenta y sensible a los ejemplos de personas, empresas, comunidades y países que alcanzan un estado de riqueza, bienestar y desarrollo sostenido en el tiempo, podremos descubrir que todos comparten y refuerzan la confianza, el bien común, el trabajo centrado en la persona, en su dignidad y felicidad.
En mi experiencia profesional con organizaciones de distintas industrias, veo que seguimos tratando de superar los nuevos retos con los paradigmas tradicionales que ya no son suficientes en el contexto actual. La falta de un diagnóstico y atención adecuados están generando que las organizaciones tiendan a enfermarse. Esto fue lo que me motivó a crear HUMA, para poder ayudar a las empresas a descubrir y potencializar a las personas como el factor fundamental de éxito y que les permitirá superar los nuevos desafíos.
Queremos construir juntos las condiciones que impulsen el poder que tiene la empresa para impactar en la calidad de vida de muchas personas y crear mayores condiciones de bienestar y felicidad pública.
-Luis Alonso Castellanos Velasco
Mark Twain dijo: "Los dos días más importantes de tu vida son el día en que naces, y el día en que descubres por qué.” Esta frase me hace sentido porque llevo muchos años interesado en el comportamiento humano, soy psicoanalista y coach lo cuál me ha permitido aproximarme desde dos enfoques diferentes al reto que implica hacer ese descubrimiento.
En mi consulta privada y en espacios cotidianos escucho todo el tiempo a las personas quejándose de su trabajo, de sus jefes, de los horarios, de los bajos sueldos, de los maltratos, de las pocas oportunidades de crecimiento, del nulo reconocimiento, de ambientes tóxicos, de relaciones de abuso de poder, de tener que trabajar constantemente bajo presión, etcétera. Todo esto para cumplir con la exigencia de más en menos tiempo y mejor (como sea y sobre quien sea), lo que provoca que las personas no sean el elemento central convirtiéndose en seres autómatas que sólo tienen en mente cumplir con un horario y llegar a la meta (generalmente de una utilidad). Byung-Chul Han lo describe de forma magistral: “Ahora uno se explota a así mismo figurándose que se esta realizando; es la pérfida lógica del neoliberalismo que culmina en el síndrome del trabajador quemado.”
Por otra parte, el servicio al cliente en todas las ramas en México es, en su mayoría, malo o inclusive pésimo pero no decimos nada, no exigimos, bueno sí, pero a la selección mexicana de futbol, no a los políticos, no a las personas que están en el área de atención al cliente, no a nosotros mismos. ¿Por qué? Porque es una de las tantas cosas que se han normalizado, “porque así es, porque así ha sido” y tristemente para muchas personas “así será”.
Cuando te juntas con las personas correctas todo se potencia y es así como afortunadamente coincidí con Karla y Luis para formar Huma Constructores y brindar soluciones a estas y muchas otras problemáticas. Creo firmemente que nunca debemos subestimar el poder que tienen los pequeños cambios, por más sutiles y obvios que nos parezcan pueden conducirnos a resultados que no teníamos contemplados.
Encantado de trabajar con ustedes, contigo.
- Jesús Onofre
Estoy en HUMA porque me encanta trabajar con un equipo de personas, que con un perfil profesional distinto al mío, comparten el mismo paradigma para comprender y abordar los distintos procesos y esferas que constituyen las organizaciones, así como el rol que ellas juegan en la sociedad.
Hace años, cuando me encontraba ante la elección de carrera tenía principalmente dos opciones: psicología o negocios internacionales, pensando en aquel entonces que eran incompatibles pues leía la creencia de mi entorno que si me quería dedicar a una profesión profundamente humana, ésta no era compatible con el mundo de los negocios.
Durante mi formación académica, pero sobre todo, en mis primeros años de experiencia laboral, trabajando especialmente con el Management de una empresa multinacional conocí los retos a los que se enfrentan los gerentes para lograr resultados importantes y desempeñar su función, especialmente si buscan adoptar estilos de liderazgo que superen la lógica tradicional y contengan una visión integral de la persona. Me percaté de dos cosas: primero que entre más alto alto nivel jerárquico se ocupe en la empresa más necesario vuelve el conocimiento del comportamiento humano, pero sobre todo la habilidad para tratar con las personas. Y luego, que muchos Gerentes, aunque a nivel teórico tengan claridad de la importancia de la persona y su contribución para el logro de los objetivos organizacionales tenían dificultad para obtener los resultados esperados.
Lo anterior me impulsó a prepararme mejor para brindar un mejor servicio al Management y poderles brindar herramientas altamente eficientes y profundamente humanas, pues me di cuenta que en los enfoques clásicos de Management había una visión reducida de la persona. Decidí hacer una Maestría en Economía y Management en el Instituto Universitario Sophia (Italia), elegí esta institución por el enfoque integral que tiene hacia la persona, la empresa, la sociedad y en general todos los temas estudiados, que a su vez se abordan desde una perspectiva interdisciplinaria, intercultural e internacional.
Por otro lado, para el desarrollo de mi tesis realicé una investigación de campo en una empresa, cuya cultura estaba totalmente fundada en el paradigma centrado en la persona. A partir de este estudio he comenzado a desarrollar herramientas y metodologías que permitan a los Gerentes y organizaciones reconocer el valor inmenso de la persona, pero también del trabajo y los resultados. Ahora veo que también en el mundo de los negocios se puede tener un gran sentido humano y ser exitoso en el mercado. Mi razón de estar y formar parte de HUMA es contribuir a la construcción de prácticas empresariales que sean altamente competitivas y también satisfactorias para todas las personas que participan en ellas.
Descubrí que mi gran motor de que mi trabajo tenga un impacto en la calidad de vida de las personas, el mundo laboral es un gran campo de acción. Al ser consciente de que en el trabajo dedicamos la mayor parte de nuestro tiempo al día y que el tipo de relaciones que vivimos influyen directamente en nuestro grado de bienestar.
- Sara María Álvarez Moisés
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